Pequeños órganos que forman parte del sistema linfático. Actúan para defender el organismo y producen anticuerpos. Cuando se agrandan, se les llama popularmente “lenguas”. Entre los profanos, las localizaciones más comunes de los ganglios linfáticos son el cuello, las axilas y la ingle. Sin embargo, también hay ganglios linfáticos en otras localizaciones, como por encima de las clavículas, en el mediastino, en el abdomen y en la pelvis.
